lunes, 18 de junio de 2012

DE REGRESO...



¿Qué decir después de tanta ausencia? ¿Cómo explicar tanto silencio? ¿Qué decir después de un torbellino de intenso trabajo y delicada de salud?

Sólo la respuesta más humilde y sencilla: soy humana. Y como tal a veces no puedo abarcar, ni debo abarcar, más terreno del que me permite mi limitación humana. Estoy conciente de lo que soy, de mis fortalezas y de mis debilidades, de todo lo que he crecido y de lo mucho que me falta por crecer.

Este tiempo de silencio ha sido producto de intensas actividades, y como lo dije antes, por mi frágil salud. Con humildad he tenido que aceptar el no poder trasmitirles a ustedes, a través de cada artículo semanal, mis pensamientos, reflexiones y mi mundo interior.

Sin embargo, hoy estoy de regreso.

Estoy de regreso porque creo firmemente en lo que hago.

Estoy de regreso porque confío plenamente que lo que hago es producto  del amor.

Estoy de regreso porque más allá de mis limitaciones, soy capaz de seguir conectada interiormente con ustedes.

Estoy de regreso porque a pesar de mis limitaciones soy capaz, porque ustedes me lo permiten, de entrar en su mundo interior.

Estoy de regreso porque los amo.

Estoy de regreso porque entendí hace tiempo que se puede amar con intensidad a través del tiempo y de la distancia.

Estoy de regreso porque creo que el corazón humano tiene una capacidad ilimitada para amar, aún sin conocer a otros.

Si, estoy de regreso. Al final de cuentas, es el amor lo que siempre nos hace regresar.

Mis silencios nunca serán silencios de ausencia. Todo lo contrario, son silencios que, por circunstancias de la vida, me acercan a ustedes a través de mis reflexiones y oraciones diarias.

Estoy de regreso y agradecida a Dios y a la vida por tener una relación tan especial con ustedes.

Para mi fue particularmente hermoso el recibir textos, llamadas, mensajes, correos de parte de ustedes. Ninguno de ellos para reclamar o llamarme la atención. Todos, y absolutamente todos, denotaban una preocupación especial por mí.

Que regalo tan hermoso me concede Dios a través de ustedes!

Los amo. Estoy de regreso…